1, 2, 3. Check! Check! Ch-ch-ch-check!

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Para los tour managers, todas las giras del mundo son iguales. Da igual si estás acompañando a Coldplay o si llevas de bolo a Pepito y su Mamá. La experiencia, inevitablemente, es siempre la misma. Llegas al sitio. Hace mucho calor. Empiezas a montar. Alguien enchufa algo. Alguien bosteza. Alguien se olvidó un cable ayer en algún sitio. El técnico lleva bermudas o pantalones pirata. Suenan pitidos aleatorios y ensordecedores a lo largo del día. A alguien le huelen los pies. El bajista hace el cafre y MOLESTA. Pierdes al batería que ha quedado con un colega y no ha vuelto a la hora a la que habéis quedado. Se rompe un ampli. El hotel está a 30 km a las afueras del pueblo de al lado. Escribes veinte copias del setlist a mano y luego LO CAMBIAN. Ir de gira es todo esto y algo más (los conciertos, y eso), pero sobre todo es esperar durante horas para probar sonido. Tu vida es probar sonido todo el rato.

Bueno, ya sabes lo que dicen: la ironía es sólo otra forma de decir ‘te quiero’. Me quejo, me quejo, pero la verdad es que siempre lo pasé estupendamente cuando iba de gira.

Mis ‘pruebas de sonido’ hoy en día son algo distintas pero tienen mucho en común con las de antes. Mis ‘conciertos’ ahora son lanzamientos de nuevos diseños, con la misma anticipación y nervios de siempre. En vez de músicos peludos tengo a una patrulla de testers estupendas a las que vigilar. Dicho esto, por suerte, no todo es igual. Aquí no hay cafres, ni pitidos ensordecedores y aunque a veces también nos falta algún cable, normalmente lo encontramos a tiempo. Nuestros tests a veces parecen una fiesta, vamos a toda velocidad y sólo pasamos calor cuando tejemos con gorda en agosto. Nos lo pasamos estupendamente.

Mis testers son las más mejores y aquí tengo una serie de posts listos para enseñarte todo lo que hacen. Hoy empezaré por sus proyectos del Stanley Slipover y en los siguientes posts veremos sus proyectos de otros diseños. Recibamos con un cálido aplauso a nuestras estrellas. Suban al escenario, señoritas


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¡Christina de Rauwerk la ha clavado tanto con su versión fluor del Stanley! La verdad es que es una de esas prendas que cambia totalmente según qué color elijas y a las pruebas me remito.

Puedes ver los detalles de su proyecto aquí.

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Bueno, por si a alguna le quedaban dudas de como ponerse el chaleco y quedar como una señora nórdica de bien, aquí Arancha aclara cualquier duda. Ha utilizado Ulysse de De Rerum Natura, que es una sustituta fantástica a la lana original.

Puedes ver los detalles de su proyecto aquí.

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Dorothea usó  Di Gilpin Lalland en el color Morion para su versión oscura del chaleco. Me encanta como se ve combinado con una camisa ruffleada a lo “Regreso a Howard’s End”.

Puedes ver los detalles de su proyecto aquí.

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Eva también eligió Ulysse para su chaleco ¡y le quedó fantástico! Creo que puedes ver muy bien cual es la holgura y el look que tiene la prenda en sus fotos.

Puedes ver los detalles de su proyecto aquí

¡Más proyectos con hilos alternativos! Tanto Marta como Analía usaron Ulysse y en dos tonos super distintos de verde! Beatriz y Laura optaron por el arena

¿Por qué es tan importante echarle un vistazo al trabajo de las testers?

Seguramente, la ‘galería de proyectos’ es una de las mejores herramientas de las que dispone Ravelry (o esos benditos hashtags de instagram).

Cuando quieres tejer algo, a menos que estés decidida a utilizar la lana y el color originales, uno de los grandes retos es ‘visualizar’ la prenda terminada. A mi me cuesta horrores y soy la persona menos capacitada del mundo para elegir combinaciones de colores.

Cuesta mucho imaginar como te quedará una prenda si tu talla es distinta a de la modelo, si te apetece probar un color distinto o incluso un hilo muy diferente. En mi caso al menos, cuando diseño intento elegir colores más bien neutros para no estorbar excesivamente al diseño. Sobre la talla, también estoy algo limitada, puesto que sólo tengo una amiga dispuesta a hacerme de modelo, por lo que siempre veréis la misma talla en mis patrones.

Gracias al trabajo de las testers, puedes saltarte todas estas limitaciones y expandir un tanto tus horizontes - imaginar mejor como te sentará esa prenda según tu gusto. Me parece que la mayoría de nosotras tejemos para sentirnos autónomas, libres de imposiciones y agentes de nuestro propio estilo. Tejemos para poder ELEGIR lo que nos de la gana, así que cuanta más información tengamos a priori mucho mejor.

Si a todo ello le sumas que además es SÚPER útil leer sus notas sobre el hilo usado, modificaciones, tensión y metraje, pues, titi, no sé que MÁS TE PUEDO DECIR sobre esta maravilla de trabajo de investigación que han hecho por ti las testers. Es como tener una docena de reviews esperándote.

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